Creo que la mejor forma de de responder es como nos dice Foster en el libro, " la justicia interna es un don de Dios que ha de recibirse por gracia. El cambio interno que necesitamos es obra de Dios, no de nosotros. Lo que se necesita es un trabajo interno, y solo Dios puede obrar desde adentro. Esta justicia del reino de Dios no la podemos lograr ni ganar; es una gracia que se da" (Pág. 26). Las disciplinas Internas nos ayuda a encontrar a Dios, quien es el que nos ayuda realmente a cambiar, ya que si comenzamos a practicarlas (o si ya las practicamos) nos damos cuenta que hay cosas que solo Dios conoce, solo Dios puede ver y solo Dios puede cambiar en nuestras vidas, que ni siquiera con la mayor fuerza de voluntad lograremos cambiar en nuestras propias fuerzas.
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